Responsabilidades médicas.

Muchos de los médicos se han tenido que poner delante de una situación extrema o incluso de un caso de vida o muerte. Cuando se da alguna de estas situaciones y los médicos no tienen ninguna preferencia por parte de los familiares cercanos de la víctima, ellos toman la decisión que ven correcta y la llevan acabo. Muchas de estas decisiones no son las correctas por ello hablamos de negligencias médicas. 

Una negligencia médica no es solo por una imprudencia, si no por la mala prescripción de un medicamento, por la omisión de información a un paciente y también por la tardanza en realizar un diagnóstico.

Este es el caso del hospital de Callela (Barcelona) que fue condenado a pagar 200.000 euros a la familia de la víctima que un error en el diagnóstico de un cáncer le costo la vida. A esta víctima se le detectó un tumor en 2004 que fue catalogado como benigno cuando, según las pruebas era maligno y, de hecho acabó con su vida seis años después. A pesar de ser operada en 2004 de una extirpación del útero y de los ovarios, se les paso por alto un tumor que ellos diagnosticaron como benigno. En 2010 se la encontró una metástasis extendida a causa de ese tumor benigno y meses mas tarde murió. La familia denuncia que se produjo un error de diagnóstico que impidió a la paciente el debido tratamiento oncológico desde el año 2004 cuando se produce dicho error y hasta el año 2010 cuando se produce el fallecimiento. Este caso no es el único, miles de casos por negligencias médicas se producen al año por una mala decisión o por una imprudencia de los médicos. Pero todos somos personas y cometemos errores, y aunque se produzcan errores, sin los médicos se producirían muchas mas muertes.